El 9 de julio del año 386 nace en lo que hoy conocemos como Maras, Turquía, Nestorio, el primer patriarca de Constantinopla. Nestorio es conocido por su firme oposición al uso del término «Theotokos» (portadora de Dios) para describir a María, la madre de Jesús. En lugar de «Theotokos», Nestorio prefería el término «Christotokos» (portadora de Cristo).

La diferencia entre estos términos puede parecer sutil, pero tiene implicaciones teológicas profundas. «Theotokos» sugiere que María es la madre de Dios en su totalidad, mientras que «Christotokos» implica que María es la madre de Cristo, destacando así la humanidad de Jesús.

Nestorio argumentaba que llamar a María «Theotokos» comprometía la plena humanidad de Cristo. En su opinión, este término podía llevar a una confusión teológica, sugiriendo que la naturaleza divina de Jesús nació de una mujer humana, lo cual era problemático para él.

Sin embargo, esta postura de Nestorio generó una considerable controversia. Otros teólogos, como Cirilo de Alejandría, vieron en las enseñanzas de Nestorio una amenaza a la doctrina de la unidad de la persona de Cristo.

Cirilo y sus seguidores sostenían que Cristo tiene dos naturalezas (una divina y una humana) pero que estas dos naturalezas están unidas en una sola persona.

Según ellos, la posición de Nestorio podría interpretarse como una división de Cristo en dos personas separadas, una humana y otra divina, lo cual era inaceptable para la ortodoxia cristiana.

Esta controversia culminó en el Concilio de Éfeso en el año 431. En este concilio, la postura de Nestorio fue examinada y condenada como una herejía.

Los obispos reunidos en Éfeso declararon que María debe ser llamada «Theotokos», reafirmando así la unidad de las dos naturalezas de Cristo en una sola persona.

Como resultado de esta condena, Nestorio fue depuesto de su cargo como patriarca de Constantinopla y fue exiliado.

La disputa entre Nestorio y Cirilo no solo tuvo consecuencias teológicas, sino que también influyó en la política eclesiástica y en las relaciones entre las diferentes sedes del cristianismo de la época.

La controversia sobre el término «Theotokos» sigue siendo un tema de estudio y debate entre los historiadores de la Iglesia y los teólogos.

Nestorio pasó el resto de su vida en exilio, primero en un monasterio en Antioquía y luego en el Alto Egipto.

A pesar de su condena, sus ideas continuaron influyendo en ciertos grupos cristianos, dando lugar a lo que se conoce como la Iglesia Nestoriana o la Iglesia del Oriente, que se extendió por Persia y más allá.

En resumen, el nacimiento de Nestorio en el 386 marcó el inicio de una figura cuya influencia y controversia dejarían una huella duradera en la historia del cristianismo, especialmente en lo que respecta a la comprensión de la naturaleza de Cristo y el papel de María en la encarnación.

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