–Los problemas financieros no se pueden resolver con el mismo nivel de entendimiento económico que los creó.
–Las creencias limitantes sobre nuestras capacidades pueden ser superadas a través de la acción continua, el tiempo y la iteración, lleva a la convicción de que con esfuerzo y persistencia, muchas cosas son posible.
–En lugar de envidiar las oportunidades que tuvieron generaciones anteriores, debemos centrarnos en aprovechar las oportunidades disponibles en el presente.
–Un activo falso es aquel que promete enriquecernos pero en realidad nos roba sin que lo notemos.
–Sufrimos más en la anticipación de los riesgos financieros que en la realidad de los mismos.
-Si no hemos invertido en desarrollar nuestro valor, no tenemos nada que ofrecer.
-Quien no cree en el trabajo esforzado, creerá únicamente en los «milagros». Quien no cree en el cuidado de su salud, creerá únicamente en las «curaciones».
-Algunas veces en lugar de enfrentar y resolver nuestras dificultades económicas, nos distraemos tratando de resolver dificultades a otros, lo cual es una forma de evitar abordar nuestras propias necesidades y retos financieros.
-La frase que más perjudica nuestras finanzas es «lo haremos después».
-Procuremos con todas nuestras fuerzas a no quedarnos estancados y a asociarnos con personas exitosas para mejorar nuestras oportunidades financieras.
–Animémonos si lo requerimos a aceptar los cambios y movernos hacia donde hay oportunidades, como lo hacen hoy en día quienes se trasladan en busca de mejores opciones financieras.
–En algunos casos, ni el colegio ni nuestro entorno nos enseñarán sobre el manejo del dinero; es esencial que desarrollemos un criterio financiero bíblico.
–La planificación financiera es el proceso de evaluar nuestra situación económica actual, establecer objetivos financieros y diseñar estrategias para alcanzarlos, asegurando un manejo adecuado de los recursos a lo largo del tiempo.
–El dinero hace que nuestras decisiones se tomen de manera emocional en lugar de racional.
–El verdadero poder financiero radica en tener control sobre nosotros mismos.
–Dejemos de asumir que siempre tendremos tiempo; los años pasarán y no lograremos nuestras metas financieras si no actuamos ahora.
–Las acciones de hoy determinarán nuestros resultados financieros de mañana.
–Solo la acción de tomar decisiones y medidas concretas hacia nuestras metas económicas puede superar la desmotivación financiera.
–Para ser exitosos en la vida financiera, debemos superar continuamente nuestros propios límites.
–Vivamos con menos de lo que ganamos para aumentar nuestros ahorros y luego nuestras inversiones y así evitar deudas.
–Controlemos nuestros gastos para evitar que crezcan y alcancen nuestros ingresos.
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